FIN DE LA SAGA MÁGICA IV.

Harry Potter y el Cáliz de Fuego.
Año de estreno: 2005.

Director: Mike Newell, primer director británico de la saga, con títulos en su filmografía como Cuatro bodas y un funeral o La sonrisa de Mona Lisa.

Estrellas invitadas: Brendan Gleeson (Troya, 28 días después) como "Ojoloco" Moody, Miranda Richardson (Sleepy Hollow) como la periodista Rita Skeeter, Robert Pattinson (todavía no era conocido como el protagonista de Crepúsculo) como Cedric Diggory, y Ralph Fiennes (El paciente inglés) como "El que no debe ser nombrado".

Momentazo: las dos primeras pruebas del Torneo de Los Tres Magos: el enfrentamiento con el dragón y la aventura submarina.

Falla en: en un principio se pensó en dividir en dos partes esta película, lo cual hubiera sido un acierto, ya que este es probablemente el libro con más acción de todos. Hay demasiadas cosas que contar, por lo que la mayoría quedan contandas de forma rápida y sin emoción, sin tiempo para detenerse en ellas. Momentos tan importantes como el renacimiento de Lord Voldemort quedan como un capítulo más dentro de los muchos de esta película. Un mundial de Quidditch, la llegada de alumnos de otros colegios a Hogwarts, el Torneo de los Tres Magos, los primeros tonteos amorosos de los protagonistas, el baile de gala, una periodista entrometida, la primera muerte de la saga, un profesor que no es quién realmente dice ser y la vuelta del mago más terrorífico de todos los tiempos. Todo eso en 157 minutos. Demasiado pa mi body.

Criaturas mágicas: dragones, traídos expresamente de Rumanía para el Torneo; los sirenos del lago, que poco tienen que ver con Ariel; y Nagini, la serpiente-mascota de Voldemort.

Valoración de FilmAffinity: 6,5.

Valoración de Cinemanation: 6,5.